Emiliano cierra ‘La Moderna’, avance del capítulo 334 (5 de febrero)
‘La Moderna’ cierra tras salir a la luz numerosos casos de intoxicación por sus productos, en el capítulo de mañana.
El ambiente en La Moderna se torna tenso y preocupante cuando los primeros casos de intoxicación comienzan a salir a la luz. Clientes que habían consumido repostería del salón empiezan a manifestar síntomas alarmantes, lo que pone en estado de alerta a todo el equipo.
Fermín, consciente de que cualquier error podría hundir la reputación del negocio, no duda en tomar una medida drástica: suspender la venta de alimentos y limitar el servicio solo a bebidas hasta que se determine el origen del problema. La noticia genera incertidumbre entre los empleados, quienes se preguntan si la crisis será pasajera o si marcará el inicio de un declive inevitable.
Ante la gravedad de la situación, Pietro revisa mentalmente cada detalle del día en que se prepararon los productos afectados. Repasa los ingredientes, los procedimientos y a las personas que estuvieron involucradas en la cocina.
Finalmente, un detalle lo sacude: la crema pastelera, utilizada en varios de los postres consumidos por los clientes intoxicados, fue elaborada por Simón.
La sospecha comienza a tomar forma en su mente. ¿Fue un descuido o un acto premeditado? Conociendo los conflictos recientes en el obrador y el carácter de Simón, Pietro no puede evitar pensar que esto podría no ser una simple casualidad.
Ese mismo día, Marcelina inicia su primer día de trabajo en La Moderna. Su llegada al equipo debería ser motivo de celebración, pero no todos comparten el entusiasmo.
Quico, desde el momento en que la ve, deja claro su descontento con su contratación. Su hostilidad hacia ella se hace evidente, y aunque Marcelina intenta ignorarlo y concentrarse en sus nuevas responsabilidades, el desprecio de Quico se convierte en una constante que amenaza con hacer de su trabajo una tarea aún más difícil.
Mientras tanto, en la casa de huéspedes, Rodrigo no puede evitar sentirse desconcertado por la actitud ambigua de Iván. Desde hace días, su hermano ha adoptado un comportamiento que le resulta desconcertante.
En su último encuentro, Iván les aseguró que ni él ni Paula tienen nada que temer de él. Sin embargo, sus palabras no logran calmar a Rodrigo, quien no puede evitar preguntarse cuál es su verdadero juego. ¿Es una advertencia, una estrategia para ganarse su confianza o una señal de que algo más peligroso está por venir?
En el Madrid Cabaret, Mercedes se enfrenta a una visita inesperada. Emiliano, con su habitual actitud de dominio, irrumpe en su territorio, dispuesto a una conversación que promete estar cargada de tensión.
Mercedes, aunque sorprendida, no muestra miedo. Conoce demasiado bien a Emiliano como para dejarse intimidar fácilmente, pero sabe que cualquier trato con él siempre es un juego peligroso. La pregunta es: ¿qué quiere ahora?