Dávila tiene malas noticias para Fermín… han encontrado a Lázara, mañana en ‘La Moderna’
Tras haber estado al borde de la muerte, Marcelina recibe el alta médica. Conmovidos por su fortaleza, sus compañeros de La Moderna organizan un recibimiento en la corrala para demostrarle su apoyo.
Todos están allí, esperándola con una mezcla de alegría y alivio, excepto uno: Cañete. El jefe de camareros no se atreve a ir, pues la culpa lo consume. Sabe que Quico, el atacante de Marcelina, era como un hijo para él, y aunque jamás imaginó lo que era capaz de hacer, no puede evitar sentirse responsable.
Mientras tanto, en el mundo del cine, Ballesteros demuestra que sigue siendo un enemigo implacable. Le da un ultimátum a Agustín, dejándole claro que si quiere retomar el rodaje de “La espía intrépida”, deberá cederle los derechos de la película y permitirle figurar como director de “El retorno de la espía intrépida”.
La propuesta es un golpe bajo que pone a Agustín en una encrucijada. Si acepta, perderá el control del proyecto en el que ha puesto su alma, pero si se niega, el rodaje podría estar condenado a desaparecer. Inés y Laurita, al enterarse, se enfurecen y buscan una manera de contrarrestar la jugada de Ballesteros, pero el tiempo corre en su contra.
En otro rincón de la ciudad, Mercedes e Iván tienen una conversación crucial. Después de semanas de tensión, Mercedes toma una decisión inesperada: está dispuesta a darle una oportunidad a su amor si ambos dejan atrás Madrid.
Sabe que estar junto a Iván en la ciudad solo traerá conflictos y problemas, por lo que la única forma de que puedan estar juntos es alejándose de todo y empezando de cero en otro lugar.
Iván queda desconcertado ante la propuesta. Irse significaría romper con todo lo que conoce… pero también significaría la posibilidad de estar con la única mujer que realmente le importa.
Pero mientras estos dilemas personales se desarrollan, el verdadero golpe ocurre en La Moderna. El capitán Dávila llega con noticias que cambiarán todo para siempre.
Con una expresión sombría, le informa a Don Fermín que han encontrado el cadáver de Doña Lázara enterrado en un descampado a las afueras de Madrid.
La revelación es impactante. Hasta ahora, la desaparición de Lázara había sido un misterio envuelto en sospechas, pero ahora hay una certeza: fue asesinada y alguien intentó ocultar su cuerpo. Fermín, atónito ante la noticia, sabe que este descubrimiento solo significa una cosa: la caza del asesino ha comenzado.
